Cierzo

Michael Cooper, originario de California, se instaló en Aragón en el año 2003. Habiéndose criado en las reconocidas zonas vitivinícolas de Santa Bárbara y Santa María, no tardó en contagiarse de la pasión por el vino que sus padres y amigos elaboradores profesaban. Sus primeras experiencias como profesional en el mundo del vino fueron como escritor en los blogs Spanish Wines and More y el de la franquicia TomeVinos. En el año 2009, en un garaje de Aguarón en la región de Cariñena, emprendió una gran aventura que acabaría adoptando su propio nombre: Vinos de Michael Cooper. En la añada de 2013 decidió crear otros dos vinos: grandes vinos de viñas viejas, elaborados artesanalmente y en producciones limitadas con botellas numeradas. Michael quiso hacer vinos diferentes, vinos con personalidad propia que expresaran la identidad de la región a través de sus mesoclimas, sus suelos y sus variedades y levaduras autóctonas.

Los viñedos se encuentran en la zona de Aguarón a una altura de 650-700
metros de altitud, en dos parcelas con distintas orientaciones al sol. Una de ellas
plantada con la variedad Cariñena en pendientes con una orientación sursuroeste,
en la otra, con una orientación sur-sureste, las garnachas son las
protagonistas. Son viñedos de más de 50 años meticulosamente cuidados.